Las Abuelas de Plaza de Mayo anunciaron hoy la recuperación de su nieto número 98, un caso singular pues se trata del hijo de una mujer desaparecida durante la última dictadura argentina (1976-1983) cuya existencia era desconocida por sus familiares biológicos.

La organización humanitaria ha informado que Martín Amarilla Molfino, de 29 años, es hijo de los desaparecidos Guillermo Amarilla y Marcela Molfino, quien al momento de ser secuestrada, en octubre de 1979, estaba embarazada, estado que desconocían sus familiares.

Por ese motivo, Martín, que nació en 1980 en el hospital de la guarnición militar de Campo de Mayo, a las afueras de Buenos Aires y donde funcionó un centro clandestino de detención, nunca fue buscado por sus familiares, que incluyen a tres hermanos mayores.

NIETO DE UNA "ABUELA-MARTIR"

Martín, que según los documentos que poseía figuraba como hijo de un agente de inteligencia ya fallecido, comenzó a tener dudas sobre su identidad a los 15 años. Su búsqueda lo llevó hasta las Abuelas de Plaza de Mayo, pero el banco de datos genéticos que posee la organización sólo contiene información de personas que buscan a familiares desaparecidos.

Sin embargo, el caso tuvo resolución positiva gracias a un exmilitar arrepentido, que confirmó que Marcela Molfino había dado a luz un hijo en Campo de Mayo. El dato fue confirmado por una superviviente de ese centro clandestino de detención.

Exámenes genéticos entre Martín y sus familiares permitieron hace pocos días confirmar el parentesco. A partir de esta historia, Martín descubrió que su abuela materna, Noemí Esther Gianetto de Molfino, es una "abuela-mártir", tal como la definió hoy el secretario de Derechos Humanos de Argentina, Eduardo Luis Duhalde.

La mujer fue secuestrada en Perú en junio de 1980 y asesinada en Madrid, meses más tarde, por integrantes de un batallón de inteligencia del Ejército argentino "en una de las operaciones criminales en el exterior del Estado terrorista argentino", dijo Duhalde.

30.000 DESAPARECIDOS Y UNOS 500 BEBÉS ROBADOS

Por iniciativa de las Abuelas de Plaza de Mayo, unos 3.300 jóvenes argentinos han acudido a la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (Conadi) para investigar su procedencia, debido a que se calcula que unos 500 bebés fueron robados a sus padres durante la dictadura militar.

Según cifras oficiales, unas 18.000 personas desaparecieron durante el último Gobierno de facto en Argentina, aunque las entidades de derechos humanos elevan la cifra de víctimas a 30.000.