Un avión de Ethiopian Airlines, las líneas aéreas etíopes, se precipitó el lunes de madrugada sobre las aguas del mar Mediterráneo pocos minutos después de despegar del aeropuerto libanés de Beirut. En la aeronave viajaban 83 pasajeros, la mayoría libaneses y etíopes, además de siete miembros de la tripulación. La Marina libanesa había rescatado ayer una treintena de cuerpos sin vida, entre los que podría encontrarse --a falta de confirmación oficial-- la esposa cubana del embajador de Francia, Marla Sánchez. Las autoridades locales apuntan al temporal de viento y lluvia como la causa más probable del siniestro.

El vuelo ET409 partió de Beirut alrededor de las 2.30 horas, (la 1.30 horas en España), con destino a la capital etíope, Adís Abeba. Pocos minutos después de elevarse, el aparato perdió el contacto con la torre de control y se precipitó sobre el mar, a unos 12 kilómetros al sur de la capital libanesa, según explicó ayer el ministro libanés de Transportes, Ghazi Aridi. Algunos testigos aseguran que el avión, un Boeing 737-800, estaba envuelto en llamas cuando cayó al mar Mediterráneo.

Vientos racheados y fuertes lluvias han azotado el Líbano en los dos últimos días, provocando inundaciones en algunos puntos del país.