Afganistán ha decidido sumarse a la Alianza de Civilizaciones que propuso el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y que la ONU apoya. El presidente afgano, Amid Karzai, anunció esta decisión al ministro español de Exteriores, Miguel Angel Moratinos, que visitó ayer Kabul. En el palacio presidencial, además de entrevistarse con Karzai, charló con el anciano rey Mohamad Zaher Shah.

Veinticuatro horas antes, Moratinos había conocido en Abu Dabi la adhesión de los Emiratos Arabes a la Alianza de Civilizaciones, iniciativa que intenta establecer nuevos puentes de entendimiento de Occidente con la comunidad islámica.

En Kabul, donde la pobreza extrema convive con grandes medidas de seguridad, el agradecimiento al apoyo español a la reconstrucción de Afganistán no pudo ser más explícito. El ministro de Exteriores de ese país, Abdulá Abdulá, dijo que gracias al apoyo de España y de la comunidad internacional los talibanes se habían ido y las mujeres podían trabajar fuera de casa, "no son golpeadas por las calles, ni ejecutadas en el estadio de fútbol ante miles de personas".

OBJETIVOS España tiene encomendada la provincia de Bagdis, en el noreste de Afganistán, que se encuentra en situación peor que las urbes españolas de los años 40. La tarea de reconstrucción la protagoniza la Agencia Española de Cooperación Internacional, con el apoyo de las Fuerzas Armadas. Las tareas se centran en el establecimiento de una red de conducción de agua potable para la capital de esa provincia, la rehabilitación de un hospital y la construcción de una carretera.

Por otra parte, España y Afganistán coinciden en el enfoque que debe darse a la pretensión iraní de proseguir con su programa de enriquecimiento de uranio. Moratinos y su homólogo afgano defendieron la diplomacia como la única vía para enderezar la cuestión.