El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad advirtió hoy en Abu Dhabi, donde realiza una histórica visita, de que su país responderá "de forma dura" a cualquier ataque y pidió a los Estados árabes del golfo Pérsico una cooperación en material de Defensa.

En una conferencia de prensa en los Emiratos Árabes Unidos, Ahmadineyad también exigió la retirada de las tropas extranjeras en esa zona, al considerar que "sólo dañan y no benefician", mientras insistió en que Teherán seguirá adelante en sus planes nucleares "pacíficos".

Asimismo, confirmó que la República Islámica negociará con EEUU sobre Irak, y señaló que los dos países están de acuerdo sobre la celebración de las conversaciones en Bagdad, en presencia de representantes del Gobierno iraquí, sin precisar fechas.

"Estamos decididos a proteger nosotros mismos la seguridad de esta región", dijo Ahmedineyad en la rueda de prensa que duró uno 60 minutos y con la que concluyó su visita a los Emiratos Árabes Unidos, la primera de un jefe de Gobierno iraní a este país en más de tres décadas.

En respuesta a una pregunta de Efe sobre la opinión al respecto de los países árabes de la zona, todos aliados de Washington, Ahmadineyad respondió que "todos (en la región) son unánimes en que la presencia de los extranjeros no es beneficiosa".

"No queremos imponer nuestras opiniones sobre ellos (los árabes del Pérsico), pero creemos que (la seguridad de la zona) debe ser nuestro objetivo y tenemos buenas relaciones con ellos todos", recalcó tras recordar que los ricos países de la región "son quienes pagan de su bolsillo el coste" de la presencia de tropas extranjeras.

Ahmadineyad aludió a la gira del vicepresidente estadounidense, Dick Cheney, por los países aliados árabes de EEUU, durante la que advirtió que su país no permitirá que Irán tenga acceso a las armas nucleares o controle la zona, además de reiterar el compromiso de Washington de proteger la seguridad de sus amigos en el Golfo.

"En un principio, no hacemos caso a las declaraciones de los extranjeros que han impuesto su presencia en la región. ¿Porqué confiar en un ocupante que vino a la zona desde miles de kilómetros de distancia?", se preguntó el gobernante iraní.

Por otro lado, Ahmadineyad calificó de "muy positivas" sus conversaciones en los Emiratos Árabes Unidos, y dijo que los dos países han creado una comisión conjunta a nivel ministerial para tratar del fortalecimiento de las "excelentes" relaciones bilaterales en los ámbitos de energía, comercial, cultural y comercial.