Los iranís cumplieron ayer con la cita electoral y acudieron en masa a las urnas para elegir al hombre que ocupará el cargo de presidente del país durante los próximos cuatro años. La buena noticia del alto índice de participación --más de un 75%, según algunas estimaciones--, la más alta registrada en unas elecciones presidenciales en los 30 años de República Islámica, se diluyó de golpe al cierre de las urnas al atribuirse la victoria los dos candidatos principales.

El reformista Mirhusein Musavi se adelantó al proclamarse vencedor en una rueda de prensa. "Soy el seguro ganador de estas elecciones presidenciales", afirmó. Según sus propias cifras, obtuvo el 64% de los votos.

Tres cuartos de hora después, la agencia oficial de noticias IRNA aseguró que el triunfador era el actual presidente, el conservador Mahmud Ahmadineyad, con el 69% de los sufragios. El máximo responsable electoral de Irán refrendó las cuentas de IRNA al revelar, en una comparecencia pública inesperada, que Ahmadineyad tenía una amplia ventaja tras un recuento parcial.

Los resultados definitivos no se conocerán, probablemente, hasta hoy, pero esta disputa nada más cerrarse las urnas aventuraba una noche de crispación en las calles de Irán. Para alzarse con la victoria en la primera vuelta, uno de los cuatro candidatos debe obtener al menos el 50%, más uno, de los votos. Si no fuera así, los dos que logren más votos se medirían otra vez el próximo viernes.

Los reformistas mostraron ayer, antes ya del cierre de los centros electorales, la preocupación de que se registrase un gran fraude electoral. De hecho, denunciaron irregularidades durante la jornada. Las denuncias procedieron de un comité de supervisión de los comicios que comparte Musavi con el otro candidato reformista, el clérigo Mehdi Karrubi. Según señaló el comité, se impidió la entrada en el 40% de los centros de voto de Teherán a los interventores de sus respectivas candidaturas. Además, se emitieron hasta 7 millones de papeletas más de las necesarias solo en la capital, y un tercio de las más de 45.000 urnas eran itinerantes --viajaron de un pueblo a otro en zonas rurales--. El pasado jueves, el propio Musavi envió una carta al guía supremo, el ayatolá Jamenei, el verdadero hombre fuerte del país, pidiendo que no hubiera ningún fraude.

LARGAS COLAS Al margen de las denuncias, la jornada electoral transcurrió sin incidentes destacables. En Teherán, las largas colas frente a los centros de voto eran visibles desde primera hora de la mañana. Como consecuencia, el cierre de las urnas se prorrogó cuatro horas.

Uno de los colegios electorales más concurridos fue el que estaba junto a la casa del ya fallecido gran ayatolá Jomeini, el padre de la República Islámica. Allí votó uno de sus nietos, Hasan, y también el expresidente reformista, Mohamed Jatamí quien, a la pregunta de este diario de si creía que las elecciones iban a ser limpias, se limitó a responder: "Espero que sí". Jatamí, presidente de 1997 al 2005, ha apoyado a Musavi.

La casa de Jomeini, una vivienda modesta de dos plantas, está situada al norte de la capital. Es la zona más rica y donde se concentra la mayor parte de la población liberal de Teherán. La gran mayoría de electores encuestados respondieron que votarían a favor de Musavi. "No sé si le dejarán llevar a cabo sus promesas de más libertad si sale elegido, pero lo importante es que se vaya Ahmadineyad", dijo un joven economista.

A pesar de que Musavi, como los otros tres candidatos, forma parte del sistema político iraní, en cuyo vértice está Jamenei, que no es elegido por sufragio universal directo, muchos iranís expresaron su confianza en que el aspirante reformista sería capaz de introducir ciertos cambios que permitiesen vivir con un mayor margen de libertad. Jatamí lo intentó en su día, pero fracasó.

NUCLEO CONSERVADOR "No todo es libertad", dijo un votante de Ahmadineyad en un colegio electoral situado en el interior de una mezquita del barrio de Shush, en el sur de la capital, tradicional feudo de los conservadores. El pueblo iraní cumplió con las urnas; solo falta esperar limpieza en los resultados.