Arabia Saudí ha asegurado haber destruido dos lanchas cargadas de explosivos presuntamente controladas remotamente por el grupo de rebeldes hutíes cerca de una plataforma petrolífera en la ciudad de Jizán, en el suroeste del país.

Un portavoz del Ministerio de Energía de Arabia Saudí ha explicado el incidente en un comunicado recogido por la agencia estatal de noticias SPA, donde ha informado de que se estaba extinguiendo un incendio cerca de una plataforma flotante de instalación petrolera en Jizán tras la destrucción de dos lanchas motoras cargadas de explosivos.

Arabia Saudí ha condenado el "cobarde" ataque, así como otros actos contra instalaciones "vitales", que tienen el objetivo de "atentar contra el reino" y contra "la seguridad de las exportaciones de petróleo, la estabilidad del suministro energético mundial y la libertad del comercio mundial".

Además, "tienen un impacto negativo en la navegación marítima y exponen las aguas y costas regionales a daños ecológicos potencialmente devastadores como resultado de esos actos de sabotaje".

El conflicto en Yemen enfrenta desde 2014 al Gobierno de Abdo Rabbu Mansur Hadi, apoyado por una coalición militar liderada por Arabia Saudí, y los rebeldes hutíes, respaldados por Irán.

En respuesta a los bombardeos aéreos de la coalición militar contra los territorios del norte de Yemen controlados por los hutíes, los insurgentes lanzan ataques contra distritos saudíes fronterizos, con especial frecuencia contra aeropuertos e infraestructura petrolífera.

El conflicto en Yemen ha provocado la mayor crisis humanitaria mundial y dejado más de 100.000 muertos desde marzo de 2015.