Blair aseguró en los Comunes que la matanza de Londres no tiene nada que ver con la participación británica en la guerra de Irak, porque "los terroristas no distinguen entre diferentes políticas". La falacia del argumento salta a la vista no sólo en el discurso de Al Qaeda en internet, sino sobre todo en las explicaciones de los propios dirigentes musulmanes del Reino Unido sobre el fanatismo que provocan entre los jóvenes islámicos las imágenes de Abú Graib, Guantánamo y Palestina. En Irak, ya han muerto 25.000 civiles. ¿En qué nos ha beneficiado esa barbaridad?

*Periodista.