Iván Safrónov, uno de los más conocidos periodistas de Rusia en temas militares, ha sido arrestado este martes por agentes del Servicio Federal de Seguridad (FSB, ex-KGB) bajo la acusación de transmitir secretos de Estado a una potencia extranjera. De inmediato, los colegas del reportero se han movilizado en su favor con piquetes y cartas abiertas de apoyo, comparando su caso con el de Iván Golunov, otro reputado informador ruso, especializado en temas de corrupción entre la élite y detenido el pasado año como consecuencia de un burdo montaje policial que finalmente fue desbaratado.

Unas imágenes difundidas por el FSB y reproducidas por medios locales muestran cómo agentes de paisano introducían a Safrónov, vestido con un traje y esposado, en una furgoneta. "Safrónov, llevando a cabo tareas en favor de los servicios secretos de un país de la OTAN, recabó y entregó información acerca de la cooperación militar y técnica y acerca de la defensa y la seguridad de la Federación Rusa", reza una declaración emitida por el servicio secreto ruso.

REACCIÓN DE LOS COLEGAS

La reacción por parte del estamento periodístico liberal en Moscú no se ha hecho esperar. Kommersant, uno de los principales diarios nacionales y para el que trabajó el propio encausado durante 10 años, ha publicado una declaración en la que califica a Safrónov como "uno de los mejores periodistas del país" y un "verdadero patriota de Rusia", alabando sus "elevados estándares profesionales". Frente a la sede del FSB en la céntrica plaza Lubianka, periodistas se iban turnando en piquetes de uno a uno portando carteles de denuncia contra la detención.

La policía ha practicado ya varias detenciones entre los manifestantes, pese a que este tipo de protestas individuales son las únicas acciones callejeras que, según la legislación rusa, no requieren de autorización previa por parte de las autoridades. Una maniobra similar logró desbaratar las acusaciones falsas de tenencia de drogas formuladas contra Golunov el pasado año. "La detención de Safrónov constituye un nuevo nivel de represión", ha subrayado Andréi Soldatov, un conocido comentarista en temas relacionados con los servicios secretos rusos.

El reportero será presentado durante las próximas horas ante el juez en el Tribunal de Lefórtovo, que dictará contra él medidas cautelares. Safrónov puede ser condenado a 10 años de prisión en un juicio que, debido a la naturaleza de las acusaciones presentadas, se celebrará a buen seguro a puerta cerrada.

VENTA DE AVIONES A EGIPTO

Safrónov colaboraba desde hacía dos meses como consultor para temas informativos de Roscosmos, la agencia espacial rusa. Había trabajado en el pasado para Kommersant y Védomosti, dos de los principales rotativos nacionales del país, revelando noticias exclusivas como una venta de aviones Sujói Su-35 al Gobierno de Egipto, aliado del Kremlin en el conlicto de Libia. Las informaciones motivaron una reacción del Gobierno de EEUU, que ha amenazado con sanciones a El Cairo si la adquisición se materializa finalmente.

El reportero parece estár siguiendo los pasos de su padre, también llamado Iván, otro afamado especialista en temas militares cuyas informaciones exclusivas sobre fallidos ensayos con misiles balísticos avergonzaron al Kremlin décadas atrás. El progenitor del reportero perdió la vida en marzo del 2007 cuando se cayó de un quinto piso, un suceso que los fiscales calificaron entonces de "suicidio" pero que sus allegados nunca creyeron.