MIJAILO MIJAILOVIC, que el 10 de septiembre mató a la ministra sueca de Asuntos Exteriores, relató ayer en el juicio en su contra que la mañana del asesinato salió de su casa porque sentía "una manía persecutoria y estaba triste porque no pudo ver a su psiquiatra". El joven afirmó que entró en los grandes almacenes NK y que, al ver a Lindh, sintió voces que le decían que la atacara.