El embajador sirio en Naciones Unidas, Bashar al Jaafari, ha indicado que el Gobierno de Bashar al Assad ofrecerá "garantías" a los grupos opositores para que participen en el diálogo nacional, en una carta enviada al Consejo de Seguridad y al secretario general de la ONU, Ban Ki Moon.

"Se ofrecerán garantías a los grupos opositores para que puedan entrar al país, sin condiciones, y participar en el diálogo nacional", asegura Al Jaafari en la misiva, fechada el 9 de enero, pero que se ha hecho pública este martes.

Si bien, el representante sirio en la organización internacional ha subrayado que para que el diálogo nacional sea posible todos los combatientes --incluidos los pro gubernamentales-- deben sumarse a un alto el fuego.

Asimismo, ha reiterado el llamamiento del Gobierno de Al Assad a sus vecinos regionales para que dejen de apoyar con armas y financiación a los grupos rebeldes.

De esta forma, Al Jaafari ha detallado el plan de paz que el presidente sirio esbozó el pasado 6 de enero. Al Assad ofreció un dialogo nacional, pero excluyó del mismo a las "marionetas" de Occidente, en alusión a los principales grupos opositores.

Unos días después, el ministro de Información, Omran al Zubi, invitó a todos los grupos opositores a participar en un diálogo nacional "sin condiciones" basado "en el respeto a la soberanía nacional y en el rechazo a la interferencia internacional en todas sus formas".

Atentado en Alepo

Por otro lado, Al Jaafari ha condenado el "cobarde acto terrorista" perpetrado este martes en la Universidad de Alepo, donde se han producido dos explosiones que han dejado un saldo de al menos 83 muertos y 106 heridos.

"Los grupos terroristas en mi país suelen aprovechar las reuniones del Consejo de Seguridad para llevar a cabo atentados y esto es lo que ha pasado hoy por décima o vigésima vez desde que comenzó la crisis", ha explicado.

Según la ONU, desde que comenzó el conflicto sirio, en marzo de 2011, más de 60.000 personas han muerto a causa de los enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y las rebeldes. El régimen de Al Assad atribuye gran parte de las víctimas a atentados terroristas.