Cerca de 40 personas atacaron el sábado por la noche con fuegos artificiales y barras de hierro la comisaría de Champigny sur Marne, al este de París, en la que resultaron dañados cinco coches de policía y alguna ventana, pero no hubo que lamentar víctimas, han informado hoy a Efe medios locales.

El diario 'Le Parisien' ha precisado hoy que una persona ya ha sido detenida por el ataque, que tuvo lugar poco antes de la medianoche. El periódico indica que dos agentes se encontraban fumando un cigarrillo en el exterior cuando se acercaron los agresores. Los dos policías se resguardaron a tiempo y el grupo intentó sin éxito entrar en el edificio.

Las espectaculares imágenes difundidas en las redes sociales muestran que se lanzaron numerosos fuegos de artificio contra esa comisaría, en cuyo exterior también se incendiaron varios contenedores de basura.

Violente attaque cette nuit du commissariat de #Champigny par des tirs de mortiers et projectiles divers. Aucun policier n'a été blessé. Investigations en cours pour identifier les auteurs. Le préfet de Police exprime son soutien aux policiers visés par ces actes intolérables. https://t.co/DgFm6wui4x Préfecture de Police (@prefpolice) October 11, 2020

"Afortunadamente no ha habido ningún herido. (...) Apoyo total a nuestros policías, que hacen un trabajo difícil", dijo en Twitter el ministro francés del Interior, Gérald Darmanin, que pidió a la Prefectura de Policía la "mayor firmeza" contra lo sucedido.

Ataques en el pasado

El alcalde de esa localidad de unos 10.000 habitantes, Laurent Jeanne, señaló en 'Le Parisien' que el motivo del ataque no está claro. En su opinión, puede haber sido provocado por un reciente accidente de moto del que se culpa a la policía, aunque su responsabilidad no ha sido demostrada.

Esa comisaría ya había sido objeto de ataques en el pasado: en abril de este año también se lanzaron morteros contra ella y en el 2018 unas 30 personas también tiraron contra el edificio diversos proyectiles, como cócteles molotov o fuegos artificiales.