La cifra de muertos en el atentado con coche bomba perpetrado la víspera en el mercado central de Vladikavkaz aumentó a 18, incluido el terrorista suicida, y el número de heridos se sitúa en los 158, informó hoy el Ministerio de Sanidad de la república rusa de Osetia del Norte. "En el momento de la explosión perdieron la vida 14 personas y otras tres murieron en el hospital, entre ellas un niño de un año y medio, un hombre y una mujer", precisó el titular de Sanidad, Vladímir Selivanov, a la agencia RIA-Nóvosti.

De los 158 heridos, 107 permanecen ingresados en hospitales de Osetia del Norte, cuatro de ellos en estado de extrema gravedad, 22 graves y 77 de mediana gravedad, mientras otros cuatro evolucionan satisfactoriamente, informó el Ministerio a la agencia Interfax. Otros once heridos fueron trasladados anoche en un avión del Ministerio de Situaciones de Emergencia a Moscú. En tanto, las fuerzas de seguridad extremaron la vigilancia tanto en Vladikavkaz como en toda Osetia del Norte, donde hoy se guarda un día de luto por los muertos en el atentado.

Las primeras víctimas recibirán sepultura hoy mismo en la capital oseta, aunque la mayoría serán enterradas mañana, mientras que algunos de los fallecidos serán trasladados a Georgia, Armenia y Ucrania. "El ayuntamiento de Vladikavkaz decidió asumir los costes del entierro de todas las víctimas y la instalación de las lápidas y monumentos en los cementerios", indicó a la agencia Itar-Tass Diana Salíeva, portavoz de la administración local, que cubrirá asimismo los gastos de traslado.

El atentado, perpetrado en el último día del Ramadán, tuvo lugar poco después de las 11.00 hora local en la entrada del mercado central de Vladikavkaz, abarrotado a esa hora del día. Según la Fiscalía, la explosión, provocada por un artefacto y una bombona de gas colocada en el maletero de un automóvil Volga-3012, tuvo una potencia equivalente a unos 40 kilos de trilita y dejó un cráter de casi un metro de profundidad. Las autoridades indicaron que el vehículo tenía matrícula de Ingushetia y procedía de esa vecina república rusa, donde fue detenido su anterior dueño.

Horas más tarde, el director del Servicio Federal de Seguridad (FSB, antiguo KGB), Alexandr Bórtnikov, anunció en Vladikavkaz la detención de tres sospechosos. El ministro del Interior ingush, Víctor Pogolov, señaló que el propietario del coche dijo haber vendido el mismo a un desconocido la víspera del ataque y agregó que "con gran probabilidad se puede decir que (el dueño del vehículo) no tiene relación alguna con el atentado".

Al mismo tiempo, declaró que "decir que este crimen fue cometido por habitantes de Ingushetia es sacar conclusiones precipitadas". En 1992, Osetia del Norte e Ingushetia protagonizaron cruentos enfrentamientos interétnicos que en diez días causaron un millar de muertos. La crisis ingush-noroseta tiene su origen en reclamaciones territoriales y se convirtió en el primer conflicto étnico librado en el territorio de Rusia después de la desaparición de la Unión Soviética.

Éste es el cuarto atentado terrorista en el mercado central de Vladikavkaz en los últimos once años. El más grave de ellos fue perpetrado el 19 de marzo de 1999, cuando una bomba mató a 52 personas y dejó heridas a otras 168. Osetia del Norte, la única república de mayoría cristiana ortodoxa del Cáucaso ruso, ha sido escenario de numerosos ataques terroristas en los últimos años. El más sangriento de ellos fue perpetrado hace seis años por un comando chechén que capturó la escuela Nº1 de Beslán, toma de rehenes en la que murieron 334 personas, 186 de ellas niños.