El número de incidentes aumentó de forma significativa durante la noche del martes al miércoles en Bélgica, con un total de 14 automóviles incendiados y 7 detenidos, según el recuento oficial. A pesar de que el número de vehículos afectados triplica los de las dos noches anteriores, las autoridades belgas insistieron en restar importancia a la situación.

"Son hechos aislados e individuales que no han estado acompañados de concentraciones de personas. En ningún caso se ha producido tensión elevada o agitación", señaló en un comunicado el Gobierno, que olvida los choques de los días anteriores, en Bruselas y Lieja, entre grupos de jóvenes y las fuerzas del orden.

La situación es similar en varias ciudades de Alemania. El martes por la noche, 10 vehículos fueron incendiados en Berlín y Colonia. La policía considera que son actos de vandalismo provocados por los jóvenes que desean ver vehículos incendiados como en Francia desde hace más de una semana.

BARRIOS DE EXTRANJEROS En Berlín, los incendios se registraron en los barrios de Wedding y Pankow. El primero se caracteriza por una masiva presencia de extranjeros; el otro es uno de los focos anarquistas de la capital. La policía anunció que las fuerzas del orden han elaborado un plan para aumentar la vigilancia.