Un juez y un fiscal haitianos interrogan hoy en su habitación de un hotel de Puerto Príncipe al ex presidente Jean Claude Duvalier, quien llegó el domingo al país tras 25 años de exilio en Francia. El fiscal Aristidas Auguste y el juez Gabriel Ambroise acudieron al hotel donde se hospeda el expresidente, según constató Efe, mientras que el abogado Reynold Georges dijo a los periodistas que Duvalier le llamó para pedirle asistencia legal. A la salida de Duvalier de Haití en 1986, tras una revuelta, se estimó que podía haber desviado fondos del Estado a cuentas en el extranjero, y se le atribuyeron decenas de miles de muertes. En 1987 fue juzgado ante un tribunal por una demanda civil por el presunto desvío en provecho propio de 120 millones de dólares de fondos del Estado, y en 1991 se presentó otra demanda por el supuesto robo de 800 millones que al parecer tenía en distintos bancos de EEUU, Suiza y Francia. En las inmediaciones del hotel, situado en el sector de Juvenat, en Pétionville (periferia este de Puerto Príncipe), se observa la presencia de fuerzas especiales. Entre el patio del hotel y la habitación que ocupa Duvalier se aprecia un constante ir y venir de agentes y oficiales de la Policía Nacional de Haití (PNH), mientras que en el exterior se escucha el sobrevuelo de helicópteros. Una fuente judicial dijo a Efe que el dispositivo se estableció para arrestar a Duvalier. El letrado Reynold Georges, a preguntas de los periodistas, se limitó a calificar de "curiosa" la situación creada en torno al hotel Karibe, donde el exgobernante permanece desde la noche del domingo en compañía de su esposa, Véronique Roy. Jean Claude Duvalier, también llamado "Baby Doc", gobernó entre 1971 y 1986 como sucesor de su padre, Francois Duvalier, quien lo había hecho desde 1957. La familia Duvalier lideró un régimen al que se considera responsable de numerosos crímenes y del desvío de sumas millonarias de dinero de los fondos del Estado. Amnistía Internacional (AI) pidió el lunes al Gobierno haitiano que ponga a Duvalier a disposición de la justicia por lo que consideró sistemáticas y generalizadas violaciones de los derechos humanos cometidas en Haití durante su régimen. La organización Cáritas de Haití opinó hoy que tras el regreso del expresidente corresponde a la justicia "hacer sus deberes y responder". La Alta Comisaría de la ONU para los Derechos Humanos, por su parte, consideró que el inesperado regreso del expresidente abre muchos interrogantes sobre "la impunidad y la rendición de cuentas" sobre sus años de mandato, pero desconoce si será posible procesarle. "No está claro si Haití está en posición de poder arrestar y abrir un proceso a Duvalier", dijo hoy en conferencia de prensa Rupert Colville, portavoz de la Alta Comisaría, Navi Pillay.