La comunidad internacional se comprometió ayer a ayudar con un total de 500 millones de dólares (390 millones de euros) al pueblo palestino, cuya situación humanitaria fue calificada por la ONU de "bomba de relojería".

Este paquete fue recaudado en la Conferencia Internacional de Donantes para los Territorios Palestinos que ayer reunió a 50 países y organizaciones humanitarias en Estocolmo, donde el jueves se pactó una ayuda de 700 millones para el Líbano.

La ministra sueca de Ayuda Humanitaria, Carin Jamtin, aseguró que se ha logrado "un resultado fantástico" en esta cumbre. La UE prometió 50 millones de euros para paliar la situación en esos territorios, sobre todo en Gaza, donde "la escasez de agua, electricidad y cuidados médicos es grave", según un comunicado del Gobierno sueco.

Jan Egeland, subsecretario general de Asuntos Humanitarios de la ONU, afirmó que la situación es "una bomba de relojería". Según Egeland, hay 1,4 millones de palestinos que "viven en una jaula" pues las fronteras "están cerradas". Según un cooperante, la malnutrición ha llevado a las parturientas a no poder amamantar a sus hijos.