Todo vale en la batalla por el reparto de poder en la UE. Aznar invocó ayer el Testamento de Adán --libro apócrifo anterior al siglo V--, para defender su postura frente a las pretensiones de Francia y Alemania de reducir el peso de España en el Consejo Europeo.

"No sé en qué artículo del Testamento de Adán está escrito que cuando unos defienden sus intereses nacionales son europeístas y cuando otros lo hacen son egoístas", replicó irónico a quienes lo acusan de obstaculizar la construcción europea. Se da la circunstancia de que el rey francés Francisco I, usó este argumento para cuestionar el Tratado de Tordesillas.