Periodista El presidente del Gobierno, José María Aznar, ha declarado al semanario alemán Der Spiegel que entiende su actuación en el conflicto como una defensa de la legalidad internacional. "No voy a derramar una lágrima por Sadam Husein (si estalla la guerra)", afirma. Según el presidente español, "Sadam es un hombre de poco fiar" y constituye una amenaza para la paz mundial desde el año 1991. "Aunque no todos se den cuenta del peligro", añade.

Preguntado sobre si puede ningunear a la opinión pública española ("fuertemente comprometida" a favor de la paz, según la revista), Aznar responde que "siempre hay que escucharla" aunque, añade, deben ser los políticos quienes tienen que "asumir toda la responsabilidad".

Aznar defiende el proyecto de resolución elaborado por EEUU, Reino Unido y España y considera que puede obtener un amplio consenso en el Consejo de Seguridad. La ministra de Exteriores, Ana Palacio, repitió ayer esta tesis y dijo que existen "razonables expectativas" de que la resolución se apruebe.