El régimen iraquí, amparado por el informe positivo de los inspectores del desarme, exigió ayer al Consejo de Seguridad de la ONU el levantamiento del embargo que le impuso en 1990. "Hay que levantar totalmente el embargo, ya que Irak ha cumplido las resoluciones internacionales y todo el mundo ha visto los objetivos de Estados Unidos", subrayó un comunicado emitido tras una reunión del Gobierno presidida por Sadam Husein, al tiempo que la ONU confirmaba la destrucción de seis misiles prohibidos Al Samud 2 más.

La exigencia del levantamiento del embargo fue la reacción de Irak al ultimátum de 10 días que el viernes le impusieron Estados Unidos y Gran Bretaña para desarmarse. Bagdad respondió a esas amenazas amparándose en los aspectos mas positivos del informe de los jefes de inspectores de la ONU, Hans Blix y Mohamed el Baradei, que destacaron el aumento de la cooperación iraquí. Además, las autoridades iraquís pidieron al Consejo de Seguridad que "denuncie las mentiras de EEUU" y "obligue a Israel a desmantelar todo su arsenal de armas de destrucción masiva y a retirarse de los territorios ocupados".

FIN DE LA COOPERACION

En círculos diplomáticos en Bagdad, la reacción iraquí ha sido interpretada como el primer signo de que Irak se plantea interrumpir su cooperación con la ONU ya que, de todos modos, EEUU va a atacar. "El régimen iraquí esta muy decepcionado por el hecho de que ni siquiera el sacrificio que supuso la destrucción de los misiles Al Samud, que eran vitales para su defensa, haya servido para evitar el ataque", señalan fuentes diplomáticas en la capital iraquí.

Por el momento, la ruptura aún no se ha consumado y los técnicos iraquís, reanudaron ayer la destrucción de los Al Samud 2, desmantelando seis más. Uday Al Tai, portavoz del Ministerio iraquí de Información, quiso quitar hierro a la polémica suscitada por el hecho de que los técnicos iraquís interrumpieran su actividad el viernes (fiesta semanal musulmana), pese a las exigencias de la ONU de desmantelar los Al Samud 2 cuanto antes. En total, en las últimas semanas, 40 de estos proyectiles han sido destruidos.

El portavoz precisó que la pausa del viernes fue acordada con la Unmovic, puesto que los técnicos iraquís trabajaron el martes, pese a que se celebraba el año nuevo musulmán.