El expresidente del Gobierno italiano y líder del conservador Pueblo de la Libertad (PDL), Silvio Berlusconi, amenazó hoy con salir del Gobierno de unidad nacional de Enrico Letta si no se elimina el impuesto sobre la primera casa (IMU, en italiano).

"No podemos formar parte de un Gobierno que no aplique las medidas sobre el IMU, (es decir la restitución de lo que ya han pagado los italianos y su abolición definitiva)", afirmó Berlusconi a los medios de comunicación italianos antes de entrar a votar en el Senado la confianza al Gobierno de Letta.

La formación de Berlusconi, el PDL, junto con el Partido Demócrata (PD), al que pertenece Letta, y Elección Cívica, del expresidente del Gobierno Mario Monti, han dado vida a un Gobierno de unidad nacional ante la imposibilidad de crear un Ejecutivo tras los resultados de las pasadas elecciones del 24 y 25 de febrero.

Para la formación del Gobierno, el PDL había puesto sus cláusulas y una de ellas era la abolición del impuesto sobre la primera casa, la gran promesa de Berlusconi durante la campaña electoral.

Letta explicó ayer en la Cámara de los Diputados en el discurso en el que se detallaba el programa de este Gobierno, que una de las primeras medidas será la "congelación" en junio del pago del segundo trimestre de este impuesto.

El ministro de Asuntos Regionales de este nuevo Ejecutivo, Graziano Delrio, puntualizó hoy que la suspensión de este plazo "es para ganar tiempo mientras se estudia una reforma para reducir la tasa para las familias con menos ingresos".

"No podremos formar parte de un Gobierno, ni apoyarlo externamente (si no se cumplen las medidas del IMU). Pues tenemos este compromiso con nuestros electores y queremos mantenerlos", agregó Berlusconi, quien se mostró "confiado" en que el Ejecutivo cumpla con la abolición de la tasa.

El IMU se prevé que será uno de los temas más conflictivos en el camino de este Ejecutivo, ya que con el impuesto sobre la primera casa se esperaban recoger en este segundo semestre cerca 2.000 millones de euros que van a las arcas de los municipios que ya han advertido de los problemas que esto conllevará.

"Existe un problema de liquidez para los ayuntamientos que intentaremos afrontar", aseguró Delrio.

Tanto el Partido Demócrata como Elección Cívica habían previsto en sus programas electorales una eliminación del IMU sobre la primera casa de manera gradual y no contemplaban la devolución de los 3.900 millones de euros recogidos en 2012 con la reintroducción de este impuesto por parte de Monti y que había abolido Berlusconi.