“Como médico desaconsejo la vuelta de Berlusconi a la política”, dijo el cirujano Alberto Zangrillo, después de que el pasado junio operase al exprimer ministro a corazón abierto. “No me retiro”, respondió al cabo de poco el 'Cavaliere' que entonces aseguró que esperaba “ser todavía útil a los italianos”. En su opinión, “no hay líderes a los que confiar nuestro futuro. En Italia hay carencia de líderes”.

La edad, los numerosos achaques físicos -corazón, próstata, tropiezos, desvanecimientos--, los consejos médicos y una clase política que en pocos años se ha rejuvenecido, han hecho mella en Berlusconi. Pero antes de retirarse de escena -quien sabe si solo momentáneamente- ha querido dejar claro quién debe de ser su sucesor.

Lo reveló la semana pasada, cuando señaló al industrial Stefano Parisi como su heredero político y futuro líder de Forza Italia (FI). De 59 años, Parisi fue el candidato conservador a la alcaldía de Milán en las elecciones municipales del pasado mes de junio, que perdió por solo unas décimas frente al candidato progresista. “Es el líder con más consenso”, ha dicho Berlusconi.

LUCHA INTERNA

Una decisión que no ha sentado nadie bien en ciertos sectores del partido, en cuyo seno se vive una lucha interna por hacerse con la herencia de Berlusconi. “Lo decimos en voz baja, pero en Forza Italia hay un problema”, ha comentado Matteo Salvini, líder de la Liga del Norte y aliado más antiguo y electoralmente más importante de Berlusconi.

“A los 79 años, si yo fuera Berlusconi, gozaría de los frutos de mi inmenso trabajo y me ocuparía del Milán”, ha afirmado Salvini. La realidad es que tampoco podrá dedicarse al equipo de fútbol porque precisamente esta semana ha vendido el club a los chinos -Gobierno de Pekín incluido- por 740 millones de euros.

“Permanecemos en el partido, pero la cúpula de Forza Italia debe ser renovada completamente”, ha reclamado, por su lado, el exministro conservador Raffaele Fitto, considerado el político rebelde de FI.

“El centroderecha debe de ser reconstruido”, ha insistido Roberto Maroni, exsecretario de la Liga del Norte y presidente autonómico de Milán. Maroni ha advertido que si no es así “(el primer ministro) Matteo Renzi estará destinado a vencer por la incapacidad de reorganización del centroderecha”.

INTERLOCUTOR PRIVILEGIADO

En términos similares se ha manifestado el exministro y veterano diputado de FI Altero Mattioli. “Esta historia de Parisi es un invento del tercer milenio. Forza Italia está explotando”, ha señalado.

La prensa recoge también esta percepción. “Caos en Forza Italia”, han titulado varios diarios en referencia al relevo de la vieja guardiadel partido por la quinta de los cincuentañeros.

El partido además ha perdido relevancia y peso en la política italiana sobre todo después de romperse el llamado “Pacto del Nazareno” (sede nacional de los progresistas). El acuerdo, alcanzado por Berlusconi y Renzi para sacar adelante algunas importantes reformas, mantenía a Berlusconi como interlocutor privilegiado del Gobierno. Sin duda, el pacto le era favorable, no solo en el ámbito político sino también en el privado, principalmente por disponer de unimperio industrial que, en parte, depende de las concesiones del Estado.

Después de haber salido airoso de los numerosos sumarios y procesos (más de 30), con una sola condena en su haber (cuatro años por estafa fiscal), rebajada en parte por buena conducta, en el horizonte de Berlusconi permanecen siempre las secuelas de la ley anticorrupción, por la que el exprimer ministro no puede presentarse como candidato, en el caso que lo deseara, hasta el 2019.

En los últimos meses, el líder político se ha afianzado en Mondadori, pero ha vendido una parte de la aseguradora y banco Mediolanum, se ha desprendido del equipo de fútbol del Milán, así como de numerosas villas y mansiones y de otras sociedades.

PACTO DE DIVORCIO

Ahora le falta arreglar el contencioso que mantiene con su exesposa, Veronica Lario. Cuando pactaron el divorcio se acordó que Berslusconi le pasaría una pensión 1,4 millones de euros al mes.

Ahora, los abogados de Berlusconi insisten en saber por cuanto tiempo su cliente deberá pagar. Los letrados de Lario, de 59 años, han presentado un plan de esperanza de vida de su exesposa de 30 años. Demasiado tiempo, se han quejado los represenantes del 'Cavaliere' que piden basarse en la esperanza de vida del exmarido.

Ataques machistas del líder de la Liga Norte a la jefa del Congreso

"Eres una tarada mental", "una muñeca hinchable", "te preocupan más los inmigrantes que los italianos". El líder de la Liga del Norte, Matteo Salvini, lleva estas semanas de canícula insultando a la presidenta del Congreso, Laura Boldrini. Varios analistas italianos lo consideran una treta para obtener espacio en los medios, después de que en las últimas elecciones municipales y regionales parciales la Liga haya ido perdiendo consensos y sus compañeros de partido hayan empezado a disputarle el liderazgo.

"Hay que sustituir a los italianos que no hacen hijos con los inmigrantes: pregúntate (Boldrini) por qué los italianos no hacen más hijos", prosigue la retahila de críticas e insultos. “"Eres una cabra", "una maestrilla", "la nada hecha mujer", añade Salvini, secundado por una militante del partido que, vía Facebook, invita a "eliminarla físicamente", alarmando a las autoridades y políticos en general.

Al coro de Salvini se han añadido los diarios conservadores, 'Il Giornale' y 'Libero': “Extended un velo piadoso (sobre Boldrini) antes de que lo imponga a todos”, “facciosa”, "deja en paz a las mujeres que se desnudan". "Deje de tocar los c.", escribe Alessandro Sallusti, director de I'l Giornale', de la familia Berlusconi.

“Cuando un mujer ocupa cargos públicos se desencadena contra ella la agresión sexista (...), que usa un léxico que habla de humillación y de sumisión”, ha comentado Boldrini.

“Con los moderados, perdemos”, explica Salvini, que ha intentado convertirse, sin conseguirlo, en líder de los conservadores, por lo que el resto de su partido empieza ahora a disputarle el liderazgo y su viraje hacia la extrema derecha, que le acercad a Marine Le Pen y a los movimientos y partidos ultras de Europa. Un pasado viaje a los EEUU le sirvió para sacarse una foto con Donald Trump y un reciente viaje a Rusia, donde fue recibido por Vladimir Putin, tuvo su momento de gloria hasta que no se supo que el desplazamiento había sido pagado por Moscú