Las matemáticas en la campaña electoral parecen no cuadrar desde un punto de vista mediático, ya que donde debería haber cuatro solo hay tres. Están John McCain y Barack Obama. Está Sarah Palin, protagonista indiscutible del debate de los números dos hoy en Saint Louis. Pero, ¿dónde está el cuarto en discordia, el candidato demócrata a vicepresidente? Ese es Joe Biden, que navega en un segundo plano sepultado por el interés mediático alrededor de la gobernadora de Alaska. Pero hoy es su oportunidad de volver al primer plano y de acabar de desinflar el globo Palin , que da señales de alarma tras haber sacudido la carrera a finales del mes de agosto.

PREOCUPACION A diferencia de Palin, Biden habla y habla. Pero su mensaje, centrado en economía y política exterior, apenas cala. De él dependerá que Palin confirme lo se ha convertido en opinión generalizada: que en el debate repetirá sus lagunas políticas. Biden, senador por Delaware, golea a Palin en experiencia.

Si los republicanos están preocupados por lo que Palin pueda decir, a los demócratas no les gusta que se hayan reducido las expectativas de la gobernadora. Biden debe ganar a lo grande para ser considerado ganador.