El primer ministro británico, Tony Blair, afirmó ayer en la BBC que hay "varios centenares" de terroristas en el Reino Unido preparando atentados. Desde septiembre del 2001, los británicos se han acostumbrado a que Blair esgrima la amenaza de un ataque terrorista en los momentos más convenientes, y ayer era uno de ellos, al coincidir con el debate parlamentario de su nueva y polémica ley antiterrorista, que por la tarde debía ser debatida por segunda vez en la Cámara de los Comunes.

La normativa autoriza por primera vez el arresto domiciliario de cualquier ciudadano sin juicio. Blair pretendía que la orden de arresto fuera decidida por los funcionarios de Interior. Finalmente, serán los jueces quienes, a petición de Interior, decidan. El debate coincidió con una campaña de Scotland Yard que pide mantener la alerta.