El primer ministro británico, Tony Blair, que ha declarado esta mañana en relación a la investigación de la muerte del doctor David Kelly, ha afirmado ante el juez James Hutton que ignoraba que Kelly hubiera participado en la elaboración del informe de septiembre del 2002 sobre el arsenal iraquí.El testimonio de Blair en el caso Kelly puede ser clave para su futuro político. Blair ha sido preguntado si exageró las pruebas contra Irak contenidas en un dosier presentado por el Gobierno a final de septiembre del 2002, en el que se afirmaba que Sadam Husein podía lanzar en 45 minutos un ataque con armas de destrucción masiva.Kelly, un científico que asesoraba en control de armas al Ministerio de Defensa, fue la fuente de una polémica noticia del periodista de la BBC Andrew Gilligan que acusó al Gobierno de "hacer más atractivas" las pruebas contra Irak en ese informe.Gran expectaciónDecenas de personas han esperado toda la noche en fila, en saco de dormir e incluso en tienda de campaña, delante del Tribunal Superior de Londres, para poder ver y escuchar en directo el testimonio de Blair ante el juez Hutton.Grupos de manifestantes han esperado también en los alrededores del edificio, que cuenta con mayor vigilancia policial, la llegada de Blair, que ha iniciado su comparecencia judicial a partir de las 9.30 GMT (10.30 hora española) sobre el caso Kelly, después de que ayer su ministro de Defensa, Geoff Hoon, señalase ante el juez a Downing Street como responsable de tomar las decisiones clave.Las diez primeras personas de esa fila tienen derecho a una plaza dentro de la sala 73 del tribunal en la que ha declarado Blair, cuyo testimonio no será televisado, sino que se informará de él a través de transcripciones inmediatas."Ver a Tony Blair en un tribunal será algo realmente emocionante. Quiero ver si es capaz de mantener sus argumentos", ha afirmado el joven Alex Holmes, que el próximo curso va a estudiar Historia en la Universidad de Oxford.Entre los que aguardaron turno se encontraba también una turista brasileña, Claudia Rondon, de 22 años, que tampoco quería perderse esta oportunidad."Estoy deseando saber cuál será la conclusión de todo esto. El dossier estuvo siempre en las noticias en Brasil y, si es cierto que los medios y el público han sido engañados, será interesante ver qué ocurre", ha dicho la brasileña.