Tony Blair planea endurecer la legislación sobre la posesión de armas de fuego, después de que una ola de tiroteos en Londres haya causado la muerte de cuatro jóvenes en lo que va de mes. Este fin de semana otros tres hombres resultaron heridos de bala, en dos incidentes ocurridos en la periferia de Manchester.

El primer ministro laborista quiere rebajar de 21 a 17 años la edad mínima en la que alguien puede ser condenado a cinco años de cárcel por llevar un arma de fuego. Las recientes muertes al sur de la capital de tres adolescentes negros, menores de 17 años --dos de ellos ejecutados en sus propios hogares--, y de una cuarta víctima de 28 años han alarmado a los británicos.

Alquiler por 400 euros La acción de bandas juveniles ligadas al narcotráfico en barrios de Londres, como Peckham, Clapham y Hackney, se ha agravado por el uso cada vez más usual de pistolas, que se pueden alquilar por 400 euros la noche.

Blair no cree, sin embargo, que los últimos sucesos reflejen un malestar general de la sociedad británica. "Es un problema específico con una cultura delictiva y tiene que ver con armas y bandas", declaró ayer en una entrevista con la BBC. "Hay un problema particular con la sentencia de cinco años de cárcel para los portadores de armas de fuego, porque no afecta a los menores de 21 años. Debemos rebajar esa edad a los 17", señaló.

Blair ha convocado una cumbre entre varios miembros de su Gabinete y altos cargos de la policía para estudiar la violencia de las nuevas pandillas juveniles, de origen jamaicano y africano muchas de ellas, relacionadas con el narcotráfico.

El Ministerio del Interior ha ordenado un despliegue de policías armados para patrullar las áreas más conflictivas. Fuentes policiales afirman que se reforzarán los servicios de espionaje e información, que se centrarán en bandas callejeras londinenses como los Peckham Boys, los PDC Crew, los Blood Set, los Man Dem Crew y los Peel Dem.

Las fuerzas del orden reconocen no saber cuántas armas de fuego hay circulando por las calles de las grandes ciudades británicas. Los investigadores han descubierto que la misma pistola ha sido alquilada y empleada en varias ocasiones.

"Hemos visto armas de fuego utilizadas en varios delitos y hay ejemplos de diferentes agresores utilizando la misma arma en distintos puntos del Reino Unido", afirma el mando de Scotland Yard Crecida Dick.

A pesar de los últimos incidentes, el número de tiroteos mortales ha bajado en Gran Bretaña. Según el Ministerio del Interior, 97 personas murieron de un disparo en el curso 2001-02; 68 en el 2003-04; 75 en el 2004-05, y 50 en el 2005-06. Sin embargo, el número de menores de 20 años alcanzados por una bala se ha doblado en los últimos cuatro años. Las estadísticas oficiales muestran que un hombre negro tiene en el Reino Unido cuatro veces más posibilidades de recibir un disparo que uno blanco.

Venganza Agresores y víctimas son cada vez más jóvenes. "Los chicos de aquí se meten en líos y salen de la cárcel pensando que son muy duros. Solo son niños, pero con pistolas", señala Janine Easton, vecina de Billy Cox, asesinado en Clapham la semana pasada. Sus colegas han prometido vengarle. "Hay una carrera entre la policía y los miembros de la banda de Cox para ver quién da antes con los asesinos", asegura otro vecino.