Una veintena de miembros de la organización no gubernamental Bomberos sin Fronteras, que había llegado anteanoche a Madrid con el propósito de desplazarse a Irán, regresó ayer a sus hogares ante la imposibilidad de emprender el viaje por falta de avión. Los voluntarios aseguraron, indignados, que la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) les había garantizado el traslado, extremo que el organismo oficial ha negado.
Los bomberos, procedentes de Valencia, Málaga, Murcia, Albacete, Castellón y Canarias, pernoctaron la noche del viernes en el exterior de la base de Torrejón de Ardoz. Llevaban con ellos unos 2.000 kilos de herramientas para desescombro y varios perros adiestrados para labores de rescate. Tras una espera infructuosa, y sin recibir explicaciones oficiales, decidieron ayer volver a casa "muy desilusionados", según afirmó el presidente de la ONG, José Pérez.
El director de la Oficina de Información Diplomática (OID), Juan María Alzina, afirmó a este diario que es "imposible" que se hubiera garantizado a los bomberos un avión, porque Teherán aún no ha formalizado una solicitud de ayuda. Dijo que la única petición, formulada a través de la Cruz Roja, era de potabilizadoras de agua.
