La empresa BP pondrá en marcha a principios de septiembre la operación final para rematar el sellado del pozo que vertía crudo en el Golfo de México, dijo hoy el encargado de la respuesta del Gobierno de Estados Unidos al derrame, el almirante Thad Allen. Allen, que el miércoles se mostró reticente a señalar una fecha límite para concluir la operación llamada "bottom kill", que clausurará la parte inferior del pozo, indicó hoy que el Gobierno ha llegado a un acuerdo con BP para ponerla en marcha "la semana posterior al Día del Trabajo", una fiesta federal que se celebra el primer lunes de septiembre, este año el día 6.

"Hemos acordado una secuencia de acción para asegurarnos de que podemos hacer frente a cualquier tipo de presión que se genere (en el pozo). Si todo va bien, concluiríamos la operación a principios de septiembre", dijo Allen en una conferencia de prensa en Washington. El almirante emitió hoy una directiva por la que autoriza a BP a reemplazar el sistema de válvulas ("preventor") que impide que la presión en el pozo se descontrole.

El avance de la operación de sellado se había retrasado hasta ahora por la indecisión de los expertos respecto a si debían cambiar antes ese sistema fallido, situado en la boca del manantial. Antes de proceder a reemplazarlo, los equipos de ingenieros deben completar un análisis de la presión ambiental en el depósito, que comenzó esta mañana y durará 48 horas, según confirmó Allen. Los ingenieros están preocupados por la posibilidad de que el cemento con el que sellaron la boca del manantial hace dos semanas haya atrapado "hasta 1000 barriles de petróleo" en el espacio que separa la tubería principal del pozo y las capas que la protegen, explicó.

Para aclarar estas dudas, el Gobierno dará luz verde en los próximos días a una operación llamada "de pesca", que evaluará él estado de la tubería antes de cambiar el "preventor" y comprobar su resistencia. Los equipos retomarán entonces el excavado de un pozo auxiliar que se encuentra a unos 15 metros de distancia de la parte inferior del depósito, para conectar ambos conductos y proceder con el sellado definitivo de la base. "Estamos muy, muy cerca del final de este desastre", aseguró hoy Allen.

Este desastre ecológico en el Golfo de México, el mayor en la historia de Estados Unidos, comenzó el 20 de abril a raíz de la explosión y posterior hundimiento de la plataforma petrolífera "Deepwater Horizon", operada por BP en la zona. El accidente, cuyas causas aún no se han aclarado, provocó la muerte de once personas y el vertido de millones de litros de crudo que afectaron a todas las costas estadounidenses ribereñas del Golfo de México y al fondo marino.