El documento del divorcio entre la Unión Europea y el Reino Unido ya tiene la rúbrica de los presidentes del Consejo Europeo y de la Comisión Europea. Sin pompa ni medios de comunicación delante y en un despacho de la sede del Consejo, el belga Charles Michel y la alemana Ursula von der Leyen han completado el trámite con la firma del documento que todavía deberá ser ratificado por el pleno del Parlamento Europeo en votación el próximo 29 de enero.

«Las cosas cambiarán de forma inevitable pero nuestra amistad permanecerá. Empezamos un nuevo capítulo como socios y aliados. Deseando escribir juntos esta nueva página», escribió Michel en su cuenta de Twitter tras estampar su firma junto a Von der Leyen y ante la atenta mirada del negociador jefe del brexit, Michel Barnier.

El contrato de divorcio consta de más de 500 páginas en las que se detallan los derechos de los que gozarán los ciudadanos europeos, la factura a pagar por Londres y el mecanismo para evitar el regreso de una frontera dura a la isla de Irlanda, además de un protocolo específico sobre Gibraltar.

CEREMONIA ÍNTIMA / La comisión de asuntos constitucionales de la Eurocámara ya avaló el acuerdo el pasado jueves, con 23 votos a favor y 3 en contra, y está previsto que el pleno del Parlamento Europeo se pronuncie el 29 de enero en Bruselas. La votación, que requiere una mayoría simple, estará precedida de un debate de dos horas y una breve ceremonia de despedida que no tendrá lugar en el hemiciclo sino en la intimidad de la sala Yehudi Menuhin de la Eurocámara para decir adiós a los 73 eurodiputados británicos. Según explican fuentes de la Eurocámara, al acto asistirá el presidente, David Sassoli -que pronunciará un breve discurso de adiós- los presidentes de los grupos políticos y Michel Barnier. Como colofón recibirán un diploma y un libro de la Casa de la historia europea.

Cumplido el trámite parlamentario, el último paso será la ratificación final por parte de los 27 gobiernos de la UE que se producirá por procedimiento escrito un día después, el 30 de enero, a tiempo para la salida británica la medianoche del 31 de enero y que cerrará más de 45 años de matrimonio. Un acto que en el Parlamento Europeo se visibilizará con la bajada de la bandera británica que ondea ante la sede del Parlamento Europeo.

El 1 de febrero comenzará un periodo de transición hasta el 31 de diciembre del 2020, en el que el Reino Unido seguirá formando parte del mercado interior y la unión aduanera pero no tendrá voz ni voto en las decisiones.