EL NUMERO de soldados británicos muertos en Afganistán asciende ya a 100. La simbólica cifra se alcanzó tras la muerte de tres miembros del batallón del regimiento de paracaidistas el pasado domingo en un ataque suicida en la región de Helmand. El primer ministro, Gordon Brown, divulgó ayer un comunicado en el que rindió tributo a los militares "que han entregado sus vidas".