La BBC y el Gobierno de Tony Blair se enzarzaron ayer en otra disputa con el jefe de Comunicación de Downing Street, Alastair Campbell, como protagonista. Uno de los comentaristas políticos más prestigiosos de la cadena pública, Andrew Marr, afirmó el jueves por la noche en horario de máxima audiencia que Campbell iba a dimitir. "Estoy seguro de que ha decidido dejar Downing Street, ya se lo ha dicho a Tony Blair y lo han estado discutiendo" afirmó el periodista. Horas más tarde, Marr quedó en entredicho porque un portavoz del primer ministro calificó de "cotilleos sin sustancia", lo dicho.

SECRETO A VOCES

La BBC mantuvo, sin embargo, la información, que ayer repitieron sus informativos. La salida de Campbell es, en realidad, un secreto a voces. Ya estuvo en el centro de la polémica por la presunta manipulación de datos sobre el arsenal iraquí. Muchas de las especulaciones apuntan a que el hombre encargado de la propaganda gubernamental dejará Downing Street el próximo otoño, cuando concluya la investigación judicial sobre las circunstancias que rodearon la muerte del experto en armas David Kelly.

La guerra de Irak y el suicidio del científico han destrozado la credibilidad de Blair. Un sondeo, publicado por The Daily Telegraph, revela que dos tercios de los británicos creen que Blair ha perdido el control de la situación, el 65% piensa que el Partido Laborista ha perdido el rumbo y un 7% asegura no creer lo que dice el premier .