La Cámara de Representantes de EEUU aprobó ayer una enmienda que, de ser ratificada en el Senado y firmada por el presidente George Bush, permitirá una mayor frecuencia de los viajes de estadounidenses a Cuba. Se trata de un desafío a la Casa Blanca, ya que la Administración Bush había pedido a los representantes mantener las restricciones.

La medida, propuesta por el representante demócrata de Florida, Jim Davis, permitirá que los cubano-estadounidenses viajen a Cuba una vez al año en vez de cada tres. La Casa Blanca estaba dispuesta a vetar el proyecto "si contiene medidas que aligeran el bloqueo", pero el temor a perder votos en Florida mantendrá paralizado el proyecto.