La campaña electoral portuguesa entra en la recta final y las cosas se le complican al líder de la oposición, el secretario general del Partido Socialista (PS), José Sócrates, al que hasta hace poco las encuestas daban como vencedor por mayoría absoluta. Aunque, a una semana de los comicios, Sócrates sigue al frente de su principal rival, el actual primer ministro socialdemó- crata, Pedro Santana Lopes, la cuestión ahora es saber si los socialistas serán capaces de lograr la mayoría absoluta que tanto reclaman para la estabilidad política del país.

No lo tienen nada fácil, ya que su secretario general está siendo el blanco de ataques de varios tipos. El último se produjo el viernes. El semanario portugués O Independente informó de que la policía judicial portuguesa está investigando el periodo en que Sócrates fue ministro de Medio Ambiente, en el anterior Gobierno socialista de Antonio Guterres.

Según el periódico, la policía tiene fuertes indicios de que la alteración de la ley de protección de la zona del Estuario del Tajo, un área protegida al sur de Lisboa, encubrió la concesión de una licencia para la construcción de un área comercial. Y se sospecha que, como contrapartida, el Gobierno socialista contó con el apoyo económico de varias empresas para financiar la campaña.

La policía judicial desmintió que, por ahora, existan pruebas para inculpar al candidato socialista. Pero, nada más conocer la noticia, Sócrates contratacó y proclamó que todo lo publicado era mentira y que se trataba de una estrategia, para "calumniar al partido" en lo que él considera "una guerra sucia en una campaña negra".

Hace una semana, en el único debate televisivo cara a cara de los dos principales candidatos, el socialista tuvo la oportunidad de enfrentarse a Santana Lopes sobre los rumores acerca de su supuesta homosexualidad. Sócrates se sublevó contra lo que llamó "un capítulo negro para la historia del Partido Socialdemócrata", al que acusó de haber construido una campaña negativa con el objetivo de perjudicar su imagen.

Los matrimonios gays

Días antes del debate, Santana Lopes había dicho en un mitin político, rodeado de mujeres, que a Sócrates le gustan "otro tipo de regazos". En el coloquio, apeló al líder socialista a manifestarse sobre una ley que autorice los matrimonios homosexuales, pero Sócrates dijo que no era "un tema prioritario en la agenda política". Para los socialistas, lo prioritario es la economía de Portugal, que parece incapaz de remontar la crisis.