El canciller alemán, Gerhard Schröder, vaticinó el lunes tiempos "duros" para los alemanes y anunció la puesta en marcha de amplias reformas estructurales con la intención de superar la negativa situación coyuntural del país. En una entrevista a la cadena pública de televisión ARD, Schröder reconoció que sus asesores están estudiando un plan para reestructurar la ayuda para el desempleo, la seguridad social y el sistema de jubilaciones, problemas que requieren ser abordados, según precisó el dirigente socialdemócrata, con una nueva mentalidad.

El jefe del Gobierno está convencido de que es necesario cambiar la mentalidad actual, "ya que, aunque está claro que somos un país rico y que queremos seguir siéndolo, tenemos que darnos cuenta de que sólo lo lograremos si dejamos de señalar a otros y estamos dispuestos a aceptar cambios en nosotros mismos". Estas declaraciones se diferencian claramente de las pronunciadas por el mismo Schröder durante la reciente campaña para las elecciones legislativas, cuando el entonces candidato a la reelección se presentaba como defensor de las conquistas sociales y enemigo de la política socialmente fría del capitalismo extremo.

SEGUNDO CAPITULO

El "duro camino" anunciado el lunes por el canciller es la prolongación de las reformas iniciadas por la coalición gubernamental entre socialdemócratas y Los Verdes, hace cuatro años, cuando empezó su primer mandato, que puso fin al inmovilismo de la era del conservador Kohl. Tales medidas, que han sido asumidas sin mayores dificultades por la sociedad alemana, se han mostrado insuficientes, especialmente debido a los cambios derivados de la inversión de la pirámide demográfica y del paro masivo (más de cuatro millones de personas).

En definitiva, Schröder habla ahora de modificar profundamente el modelo social alemán, erosionado por los enormes fondos que se deben utilizar para pagar el seguro de desempleo, los gigantescos gastos de la seguridad social y las dificultades por las que atraviesa el sistema de las pensiones. Como primera medida, ya se ha puesto en marcha una reforma del mercado laboral, el llamado plan Hartz .