La campaña de Emmanuel Macron a las elecciones europeas del próximo 26 de mayo ha encontrado un escollo inesperado en un documento de hace 35 años que el diario Mediapart ha sacado este lunes a la luz. La cabeza de lista de La República en Marcha (LREM) al Parlamento Europeo, Nathalie Loiseau, abanderada de la lucha contra los valores que representa Marine Le Pen, figuró en una lista de extrema derecha en las elecciones de delegados estudiantiles en la prestigiosa facultad de Sciences Po.
En enero de 1984, Nathalie Ducoulombier -ese era su nombre de soltera- aparece en el puesto número seis de la candidatura de la Unión de Estudiantes de Derecha (UED), un sindicato estudiantil de extrema derecha nacido de las cenizas del Grupo Unión Defensa (GUD) que defendía una alianza de todas las corrientes conservadoras, desde los gaullistas hasta los partidarios del intelectual nacionalista Charles Maurras. En la misma lista aparecía Christophe Bay, un alto funcionario que participó oficiosamente en el programa electoral de la presidenta del Frente Nacional en 2017.
Los archivos desempolvados por Mediapart colocan Loiseau en una situación incómoda. La ex ministra de Asuntos Europeos y antigua directora de la Escuela Nacional de Administración (ENA) ha tenido que justificarse. Ha explicado que le propusieron participar en una lista para mejorar el pluralismo en Sciences Po y ampliar la presencia de mujeres y que había "olvidado completamente ese episodio".
ERROR DE JUVENTUD
"Si hubiera identificado a miembros del GUD en la lista, evidentemente, no habría aceptado. Lamento haber estado vinculada a este tipo de gente", ha reconocido Loiseau, que lo ha considerado un "error de juventud".
El entorno de la candidata sostiene que el asunto está "pillado por los pelos" porque Loiseau siempre ha combatido las ideas de la extrema derecha y su compromiso político no presenta ambigüedad alguna contra todos los ataques a los valores republicanos.
A mes y medio de las elecciones europeas, la oposición ha aprovechado el asunto para criticar la contradicción entre los compromisos juveniles de la candidata de Macron y su voluntad de liderar la batalla contra el populismo.
