En una vistosa ceremonia que tuvo lugar ayer en la Facultad de Medicina, las tropas españolas asumieron el pleno mando en la ciudad de Diwaniya, en Irak. Con la presencia del gobernador local, Hazin Kasam al Shalami, el teniente coronel Pat Malay, del Quinto Cuerpo de la Primera División de Marines, entregó el testigo a su colega español, el teniente coronel Gonzalo Sánchez Gamboa.

El jefe de la Brigada Plus Ultra, el general Alfredo Cardona, destacó, en la rueda de prensa posterior en la Base España, los primeros objetivos de la tropa que dirige. Admitió que la ciudad de Diwaniya estaba siendo más "problemática" de lo esperado. Por ello, una de sus primeras labores será "potenciar a la policía local y entregarle material antidisturbios", ya que, hasta el momento, los agentes iraquís sólo disponen de sus "propias manos" para hacer frente a cualquier tumulto. Recordó que el mandato del contingente español no incluye actuar "como fuerza de orden público en manifestaciones".

NEUTRALIDAD

Cardona hizo alusión al conflicto que se vive en Diwaniya entre la oposición y una parte del clero shií, seguidores del radical Moktada al Sadr, y el gobernador local.

Quiso subrayar que la tropa que él dirige "no ha tomado partido por nadie", pero, a su vez, recordó que su obligación es "proteger a la autoridad constituida", que en estos momentos es el gobernador. También dio a entender que la fuerza que dirige investiga el alcance de los recientes disturbios y las acusaciones que se hacen mutuamente la oposición local y el gobernador.

En la ceremonia, norteamericanos y españoles se dedicaron alabanzas mutuas.