El duelo televisado con Nicolas Sarkozy le valió ayer a Ségolène Royal un apoyo importante. El centrista François Bayrou anunció en una entrevista en el diario Le Monde que no pensaba votar al candidato conservador. La aspirante socialista celebró estas palabras, que no dudó en interpretar como un valioso sostén pese a que, según el sondeo de Opinion Way, solo una cuarta parte de los siete millones de votantes de centro opinó que Royal estuvo más convincente que su rival en el debate.

Todos los analistas coincidieron en que fue un duelo de alto voltaje del que nadie salió electrocutado. No hubo ni ganador ni perdedor. El debate televisado entre Ségolène Royal y Nicolas Sarkozy --seguido por 20 millones de franceses-- apuntaló la figura política de la candidata socialista, que mostró una cara combativa, convincente y sólida poco conocida hasta ahora. Pero a tres días de la cita electoral, Royal no ha logrado acortar en las encuestas las diferencias que la separan de su rival conservador.

"Hemos visto a una nueva Ségolène, pero llega tarde", opinó Pierre Giacometti, director de la empresa de sondeos IPSOS, que resumió así la situación de desventaja con la que Royal ha afrontado las presidenciales. En el último año, mientras Sarkozy usaba su plataforma en el Gobierno conservador para promocionarse, la aspirante ha tenido que lidiar con los elefantes de su partido antes y después de las primarias.

TALLA PRESIDENCIAL Tanto los medios de comunicación conservadores como los de izquierdas destacaron la talla presidencial ofrecida por la candidata --el veterano Le Monde apostó claramente por ella--, pero también subrayaron que las tablas benefician al que parte como favorito. El líder de la UMP superó sus propios fantasmas ofreciendo una imagen serena y conciliadora alejada de la personalidad agresiva que constituye su principal enemigo.

Por ello, la imagen proyectada por Royal en el debate de la noche del miércoles apenas se traduce en la percepción de los electores según el sondeo de Opinion Way para la televisión de información continua LCI y el diario conservador Le Figaro . De acuerdo con esta encuesta, el 53% de los franceses consideran que Sarkozy estuvo más convincente, mientras un 31% cree que fue Royal quien más convenció.

Ambos candidatos a ocupar el Elíseo lanzaron anoche sus últimos llamamientos a la movilización en los mítines de fin de campaña. En Montpellier, Sarkozy pidió un esfuerzo para "levantar un movimiento popular". En Lille, Royal dijo ver la victoria "al alcance de la mano".