Cada cierto tiempo, especialmente en verano, vuelven los ovnis. Son tan preocupantes que, durante una conversación en los años 50 entre el primer ministro británico, Winston Churchill, y el entones presidente de Estados Unidos, Ike Eisenhower, el tema salió a relucir. Churchill contó cómo los pilotos de la Royal Air Force, cuando volvían de un bombardeo durante la segunda guerra mundial, habían visto uno de esos objetos no identificados. Los dos mandatarios decidieron mantener en secreto el inexplicable suceso, para evitar el pánico masivo entre los ciudadanos.

La fuente de esa supuesta conversación es anónima y figura en una nota fechada en 1999. Nick Pope, un conocido investigador de ovnis, afirma que se trata del testimonio de uno de los guardaespaldas de Churchill, que se lo contó a un nieto científico. La fiabilidad es relativa. En el mismo documento se indica que "el Ministerio de Defensa británico no tiene ningún conocimiento específico sobre los ovnis. Tampoco los tiene en lo que se refiere a otras formas de vida extraterrestre. La actitud es la de conservar una mentalidad abierta".

En los años 50, el Gobierno británico llegó a crear una comisión especial, a cargo de los servicios de espionaje, para informar sobre los objetos no identificados. La mayor parte de aquellos documentos se destruyeron, y en el 2009 el Ministerio de Defensa eliminó el departamento que tenía dedicado a los ovnis. Actualmente, el ministerio colabora con los Archivos Nacionales para sacar a la luz todos los papeles referentes al asunto. La entrega de ayer, en la que se incluía la historia de Churchill, no es la primera que se publica, pero incluye un detalle revelador. El mayor número de ovnis avistados por los británicos se produjo en 1996, coincidiendo con la emisión de la serie de ciencia ficción Expediente X.