El Departamento de Estado norteamericano ha repartido un informe recordando que Irak produjo 10 litros de ricina. En Londres, la policía desmantelaba un laboratorio de esta sustancia. Ayer arrestaba a siete sospechosos y se incautaba de documentación en la mezquita de Finsbury Park, la del imán radical Abú Hamza al Masri.La lucha contra el terrorismo internacional tiene que ser implacable, pero la escenografía de la operación juega a la confusión (Irak-armas biológicas-Al Qaeda-mezquitas) y hace sospechar de intereses ocultos: invertir una opinión pública contraria a la guerra.