El Tribunal Constitucional turco decidió hoy la destitución de dos de sus miembros, sobre los que el pasado 18 de julio ya se había abierto una investigación por su supuesta implicación en la fallida asonada golpista producida tres días antes, informa la agencia Anadolu.

Los dos jueces expulsados, Alparslan Altan y Erdal Tercan, fueron detenidos tras el intento de golpe de Estado.

El Gobierno turco está inmerso en una amplia operación de detenciones y expulsiones de miembros de las Fuerzas Armadas, la Policía, la Judicatura, el sistema educativo, la prensa y la administración pública en general, para purgar a supuestos seguidores de Fethullah Gülen, el predicador exiliado en EEUU al que acusa del golpe.

Unas 26.000 personas han sido detenidas hasta el momento, de las que 13.500 están en prisión preventiva, y decenas de miles han sido suspendidas de sus puestos de trabajo.

Además, se han cancelado los pasaportes de 74.562 personas.