El jurista Giuseppe Conte renunció ayer al encargo de formar un gobierno en Italia, como le había pedido el Jefe de Estado, Sergio Mattarella, tras la propuesta de los partidos Liga Norte (LN) y Movimiento 5 Estrellas (M5S), después de las dificultades encontradas para elegir su Ejecutivo.

El anuncio de la aceptación para formar Gobierno fue realizado por el secretario general de la Jefatura del Estado, Ugo Zampetti, que leyó un escueto comunicado en la sala de prensa del Quirinal, la sede de la Jefatura de Estado italiana, en la que se expresaba que Conte devolvía el encargo que había aceptado con reservas. Durante la tarde de ayer también los líderes de la ultraderechista LN, Matteo Salvini y del antisistema M5S, Luigi Di Maio, se reunieron con Mattarella.

Conte llegó a esta decisión después de los problemas que ha suscitado la candidatura como ministro de Economía del euroescéptico Paolo Savona, de 81 años, conocido por sus posturas contrarias al euro. Anteriormente, la Liga ya había afirmado que no se echaría marcha atrás respecto a Savona y que en caso de veto por parte de la jefatura del Estado por ellos quedaba solo la posibilidad de volver a votar.

De esta manera la crisis política en Italia se agrava y se desconoce por el momento cuál será la decisión que tomará el Jefe de Estado. En el mismo momento en el que Conte y Mattarella se reunían, el líder de la Liga Norte, Matteo Salvini, reveló que existe el veto a un ministro en el Ejecutivo.

Un Salvini muy enfadado intervino en un mitin electoral en la localidad de Terni (centro de Italia) y aseguró que si existen vetos lo único que quedará es volver a las urnas. «Yo solo digo que por principio deciden los italianos, no los alemanes, franceses o portugueses... Para formar el Gobierno deciden los ciudadanos», agregó Salvini.