Córcega rechazó ayer en un referendo la reforma de sus instituciones impulsada por el presidente francés, Jacques Chirac, y su Gobierno. Tras un ajustado escrutinio, el no se impuso por algo menos de un punto al . El voto negativo ganó en los dos departamentos de la isla, pero en el sur sólo se impuso por 56 votos.

Un 50,98% de los votantes rechazaron la propuesta que planteaba convertir Córcega en una entidad administrativa única que sustituiría a la actual división en dos departamentos. La reforma permitía, además, que los nacionalistas pudieran alcanzar una mayor representación en la Asamblea de Córcega.

La victoria del no supone un grave tropiezo para el ministro del Interior, Nicolas Sarkozy, cuyo departamento impulsa la descentralización. Se trata de la primera derrota para el Gobierno, que tiene mayoría absoluta en el Parlamento. Chirac, que había dicho que votar era la mejor forma de ratificar la vinculación de la isla a Francia, lamentó el fracaso del .

"Los resultados demuestran como es de difícil el camino de la reforma en Córcega", aseguró Sarkozy, que añadió que pese al carácter consultivo del referendo, el Gobierno se había comprometido a respetar los resultados y, por lo tanto, la isla mantendrá sus actuales instituciones, con sus dos departamentos. Visiblemente contrariado, el ministro se felicitó por la "impresionante" tasa de participación, del 60%.

PRIMEROS ANALISIS

Políticos y analistas se apresuraron a buscar explicaciones para el triunfo del no . Para el presidente de la asamblea de Córcega, José Rossi, defensor de la reforma, el triunfo del no obedece a "miedos profundos", entre ellos el "miedo al independentismo". El alcalde de Bastia, el radical de izquierda Emile Zuccarelli, defensor del no , el resultado significa que Córcega no quiere desvincularse de Francia.