Corea del Norte informó hoy del nombramiento como ministro de seguridad del país a Choi Bu-il, hombre de confianza de Kim Jong-un, en un movimiento que indica la determinación del joven líder de seguir consolidando su liderazgo.

El nombramiento de Choi al frente del Ministerio encargado de los servicios nacionales de seguridad norcoreanos, se produjo el pasado mes de febrero, pero no fue revelado hasta hoy por el diario estatal Rodong, habitual portavoz del hermético régimen norcoreano.

En todo caso, fuentes de inteligencia de Seúl ya especularon a finales de febrero que Choi habría sido designado para el puesto en sustitución del anterior ministro, el general Ri Myong-su.

"El nombramiento puede formar parte de los actuales esfuerzos de Kim para consolidar su poder al designar a personas de confianza para puestos clave y reemplazar a quienes sirvieron a su padre", evaluó una fuente oficial en Seúl, en declaraciones recogidas por la agencia local Yonhap.

Nacido en 1944, Choi Bu-il se graduó en la prestigiosa Universidad Kim Il-sung y se convirtió en un oficial militar de carrera, alcanzando el puesto de vice jefe del Estado Mayor del Ejército Popular norcoreano.

Choi fue nombrado general en septiembre de 2010, cuando el régimen presentó formalmente al actual heredero en el poder, Kim Jong-un, en sustitución de su padre, Kim Jong-il, que murió un año y dos meses después.

Tras la muerte de Kim Jong-il, Choi fue designado vicepresidente de un comité nacional de deportes presidido por Jang Song-thaek, tío de Kim Jong-un, y considerado por los analistas como el número dos del régimen.

El anuncio hoy del nombramiento de Choi se produce el mismo día en el que está planeada la reunión de la Asamblea Popular Suprema (Parlamento) de Corea del Norte, una importante cita que podría deparar decisiones políticas sobre el futuro del régimen.

La reunión del Parlamento norcoreano acontece un día después de la sesión plenaria del Partido de los Trabajadores, en la que ayer Kim Jong un confirmó su nueva estrategia política asentada en dos pilares básicos: el progreso de la economía y el desarrollo de armas nucleares.