Después de los funerales oficiales del miércoles, Corea del Norte ha proclamado este jueves nuevo 'líder supremo' a Kim Jong-un, hijo menor de Kim Jong-il, fallecido el pasado 17 de diciembre. En un discurso ante miles de soldados en la céntrica plaza Kim il-Sung de Pyongyang, Kim Yong-nam, que ejerce la función honorífica de jefe de Estado, ha oficializado el relevo al frente de la dinastía hereditaria comunista. 'El gran corazón del camarada Kim Jong-il ha cesado de latir', ha lamentado Yong-nam, antes de hacer el solemne anuncio:

'El respetado camarada Kim Jong-un es el líder supremo de nuestro partido y del Ejército, ha heredado la inteligencia, la capacidad de mando, el carácter, el sentido moral y el coraje de Kim Jong-il'. A su lado escuchaba impasible Kim Jong-un, que ha estado flanquado por altos cargos del régimen. Con un acto memorial para honrar al fallecido líder y la proclamación de su heredero Corea del Norte abre una nueva e incierta etapa.

Una veintena de salvas de cañón han cerrado el acto. La televisión estatal KCNA ha mostrado insistentemente imágenes de Kim Jong-un durante el acto, lo que ha hecho pensar por momentos que el nuevo líder, que tiene menos de 30 años, podía pronunciar un discurso en la ceremonia que arrojara luz sobre sus planes para gobernar un país aislado, impredecible y con capacidad nuclear.

Sin embargo, ha guardado silencio, al igual que hizo su padre durante el memorial fúnebre celebrado el 20 de julio de 1994 en honor del fundador de Corea del Norte, Kim Il-sung. En esa ocasión, también fue Kim Yong-nam, por ese entonces viceprimer ministro del régimen, quien exhortó al público presente en la misma plaza a seguir incondicionalmente a Kim Il-sung. El Ejército, primero 'Construiremos una próspera nación socialista, manteniendo en alta estima a Kim Jong-un como otro general y líder supremo', ha proclamado el octogenario Kim Yong-nam, en la actualidad número dos del régimen.

Su discurso da indicios de que el Gobierno de Kim Jong-un podría seguir la línea de 'el ejército primero' implementada por su padre. A este respecto, Kim Yong-nam aseguró que 'bajo el liderazgo de Kim Jong-un', Corea del Norte avanzará 'de forma más dinámica' en el camino del 'Songun', política diseñada y aplicada por el fallecido Kim Jong-il que consiste en dar prioridad a los asuntos militares en el conjunto del Estado.

Por su parte, el general Kim Jong-gak, considerado una de las figuras emergentes en las élites militares del país comunista, ha querido despejar las dudas sobre la posible falta de apoyo de las Fuerzas Armadas al sucesor, que carece de formación castrense. En ese sentido, el general, de 70 años, ha asegurado que los soldados del Ejército Popular de Corea del Norte 'protegerán con sus propias vidas al camarada Kim Jong-un'.

Las fuerzas armadas norcoreanas, que suman más de 1.100.000 efectivos sobre una población total de 24 millones de personas y acaparan alrededor de una cuarta parte del PIB del país, son el principal garante del poder del régimen de corte estalinista gobernado por la dinastía Kim.