97 haitianos, en su mayoría niños, que tienen la intención de pasar hacia los Estados Unidos, quedaron varados en Costa Rica, por lo que las autoridades de aquel país los trasladaron a un albergue para que estén en mejores condiciones.

Después de que comenzaran su andar en diciembre pasado desde Chile, la pandemia del COVID-19 los obligó a quedarse en Costa Rica sin la posibilidad de seguir su camino; razón por la cual el subdirector de Migración, Daguer Hernández, los ha apoyado para que "vuelvan a integrarse dentro del programa del Centro de Atención Temporal de Migrantes (CATEM)".

Esto les permitirá obtener un documento migratorio temporal que les permitirá transitar por el país y eventualmente trabajar, destacando que también fueron trasladados este sábado hacia el CATEM del norte, en la localidad de La Cruz, Guanacaste, a unos 20 kilómetros de la frontera con Nicaragua.

El deseo de los migrantes es poder llegar hacia Estados Unidos y expresaron su disposición de hacerse las pruebas de coronavirus para determinar que no están infectados, con el objetivo que los dejen cruzar hacia el "sueño americano".