Las autoridades de Indonesia aumentaron hoy a cuatro el número de muertos tras el hundimiento de un túnel en una mina de cobre de la compañía estadounidense Freeport en la región oriental de Papúa, donde siguen atrapados otros 23 mineros.

El Ministerio de Energía y Recursos Minerales indicó en un comunicado que han sido rescatados con vida 13 de los 40 mineros que quedaron atrapados ayer por la mañana cuando se hundió una sala de entrenamiento del yacimiento.

Los equipos de rescate continúan hoy la búsqueda del resto de desaparecidos que, según reconoció la empresa en un comunicado, "es difícil y llevará algún tiempo".

El túnel cuyo techo se hundió conducía al depósito de Big Gossan, que forma parte del complejo de la mina Grasberg, operada por Freeport.

El yacimiento es la mayor explotación de oro del mundo y la segunda de cobre, en la que trabajan más de 20.000 personas.