Una delegación japonesa ha llegado este viernes a Seúl, la capital de Corea del Sur, enviada por el primer ministro nipón, Shinzo Abe, que pretende mejorar las relaciones bilaterales entre ambos países, tras las últimas tensiones por la soberanía del archipiélago de Takeshima.

Encabezada por el exministro de Finanzas Fukushiro Nukaga e integrada por otros dos dirigentes del Partido Liberaldemócrata, la delegación japonesa entregará a la presidenta de Corea del Sur, Park Geun-hye, una carta con propuestas de Abe para reforzar los lazos bilaterales.

Los tres enviados nipones se reunirán con la flamante mandataria surcoreana esta tarde, así como con el ministro de Asuntos Exteriores, Kim Sung-hwan, según ha informado la cadena nipona NHK.

Esta es la primera gran cita diplomática de Abe, que fue investido como primer ministro japonés el pasado mes, y para la presidenta de Corea del Sur, que oficialmente comenzará su mandato el próximo mes de febrero.

"Mientras Japón y Corea del Sur tienen nuevos gobiernos, me gustaría ejercer el papel de mediador para que este sea un buen año para ambas naciones", ha recalcado Nukaga, que ha incidido en la importancia de las relaciones bilaterales en la estabilidad de la región.

Las relaciones entre Corea del Sur y Japón se tensaron durante el pasado año a raíz de una visita del anterior mandatario surcoreano, Lee Myung-bak, a una de las diminutas islas que conforman el archipiélago Takeshima, situadas en el mar de Japón, y cuya soberanía se disputan ambos países.

En la actualidad, las islas Takeshima, con ricos caladeros en sus alrededores, están controladas por Corea del Sur, pero Japón reclama su soberanía.