El reconocimiento público por parte del presidente de EEUU, George Bush, de que la ocupación de Irak no marcha bien y de que costará más tiempo, dinero y sacrificios de los anunciados antes de la guerra desencadenó ayer una oleada de críticas de los aspirantes demócratas a la Casa Blanca. Estas críticas se vieron reforzadas por el vapuleo de los principales diarios, alguno de los cuales acusó a Bush de ocultar la verdad a los ciudadanos sobre lo que costará salir del cenagal iraquí.

"En 15 minutos intentó compensar 15 meses de engaños al pueblo estadounidense y 15 semanas de administrar mal la reconstrucción", arremetió Howard Dean, el más destacado de los aspirantes demócratas a la presidencia, que calificó de "ofensivo" el discurso de Bush del domingo.

COMPARACION DE GASTOS

Los 87.000 millones de dólares (78.300 millones de euros, 13 billones de pesetas) que Bush pedirá al Congreso para Irak provocaron una descarga entre los demócratas, que se apresuraron a denunciar el gasto, cuando la economía no repunta.

Esta cantidad "es superior a la que el Gobierno federal gastará este año en educación, el doble de lo que invertirá en carreteras, puentes, autopistas y sistemas públicos de transporte", cargó el senador por Florida, Bob Graham, también aspirante a presidente. Para Bush, según Graham, es "más importante reconstruir Irak y Afganistán que hacerle frente a los problemas muy serios que tenemos en EEUU".

Bush "aún no cuenta todo a los ciudadanos", criticó el diario The New York Times , que añadió que el presidente "tiene que decirles de verdad a los estadounidenses los sacrificios que tendrán que hacer para pagar la cuenta" de Irak. "Otros países no van a aportar suficientes tropas o dinero para reducir la carga de EEUU", consideró The Washington Post .

Los Angeles Times castigó a la Casa Blanca por haber "subestimado los costos y los peligros de imponer su testaruda voluntad en Irak". Claramente a la defensiva, Bush se mostró firme en que "no hay vuelta atrás" en Irak. Pero también pareció abrirse a un regreso a la ONU para pedir ayuda.

"Reconozco que no todos nuestros amigos estuvieron de acuerdo con nuestra decisión de aplicar las resoluciones del Consejo de Seguridad y sacar a Sadam del poder", explicó. Pero recordó a la ONU su "responsabilidad" en la reconstrucción iraquí.

MAS TROPAS BRITANICAS

Por otra parte, el Reino Unido decidió ayer enviar a otros 1.200 nuevos soldados a Irak, un refuerzo que podría incrementarse con más tropas en los próximos días. El ministro de Defensa, Geoff Hoon, anunció la decisión del Ejecutivo, que servirá, afirmó, para mejorar la seguridad en Irak y ayudar en la reconstrucción.

Mientras, en Irak, soldados estadounidenses lanzaron ayer otra de sus ofensivas casa por casa en Tikrit, feudo de Sadam Husein. El resultado de la aparatosa redada fue la de cuatro detenidos.