Tres personas han sido detenidas, dos en Eslovaquia y una en Hungría, acusadas de participar en el intento de venta de 481 gramos de uranio 235 y 238, que han sido confiscados por la Policía.

Así lo informó a Efe hoy el portavoz policial Martin Koch, quien añadió que la incautación de este material radiactivo ha sido fruto de una operación conjunta entre las autoridades eslovacas y las magiares que duró varios meses. "Se trata de una valija de 481,4 gramos", dijo Koch tras confirmar que el material confiscado es uranio 235 y 238, aunque no pudo precisar si el grado de enriquecimiento del material radiactivo alcanza el nivel necesario para su uso con fines militares. Tampoco reveló datos sobre los supuestos destinatarios o compradores del peligroso material.

El lugar de la detención fue la región oriental eslovaca fronteriza con la república magiar. El portavoz añadió que una tercera persona fue detenida en Hungría: se trata de un ciudadano de Ucrania y dos de Hungría, uno de los cuales tenía permiso de residencia en Ucrania y sus edades oscilan entre los 40 y los 51 años.

La noticia de esta confiscación ha despertado preocupación ante el temor de que Europa Central y del Este pueda servir como mercado negro a grupos terroristas que intentan hacerse con el material radiactivo necesario para fabricar peligrosas "bombas sucias". La Policía ha abierto una investigación sobre la transacción ilegal de este material, que "iban vender por 1 millón de dólares estadounidenses", apostilló Korch.

En 2003, Brno, en la República Checa, fueron detenidos dos ciudadanos eslovacos, después de que llevaran a cabo una venta de tres kilogramos de uranio natural por valor de 715.000 dólares. Con anterioridad, en 1994, los checos incautaron otra valija de casi tres kilos con uranio para fines bélicos a un grupo dirigido por el ciudadano ruso Alexandr Shcherbinin y el empresario y antiguo oficial del ejército checoslovaco y físico Jaroslav Vagner.