Al menos cuatro militares israelís han sido detenidos en los últimos días bajo la sospecha de haber robado ordenadores portátiles y otros pertrechos tecnológicos a los activistas de la Flotilla de la Libertad. Entre los detenidos hay un oficial del Ejército con rango de teniente que supuestamente vendió algunos de los equipos robados a un amigo y éste a su vez a otros amigos, informan hoy medios locales.

Según el diario Yediot Aharonot, los equipos fueron robados del Mavi Marmara, el principal de los seis barcos que formaban la flotilla internacional abordada por soldados de élite israelís el pasado 31 de mayo, ataque en el que murieron nueve activistas turcos.

Los barcos se dirigían a Gaza con ayuda humanitaria para romper el bloqueo israelí a la franja cuando fue abordada en aguas internacionales, desatando una ola de protestas generalizada contra Israel y una crisis sin precedentes en las relaciones turco-israelís. En relación con el mismo caso están arrestados otros tres militares que al parecer fueron los que sacaron del barco los ordenadores y demás artilugios, entre ellos también teléfonos móviles.

"EMBARAZOSA Y BOCHORNOSA"

Después del asalto los activistas fueron trasladados al puerto de Ashdod, al sur de Tel Aviv, y sus pertenencias confiscadas por el Ejército y la Policía. Poco después surgieron las primeras denuncias de algunos activistas sobre que no habían recibido de vuelta sus pertenencias o que se había usado la tarjeta de crédito de un periodista de nacionalidad italiana que iba en el barco.

Un oficial de alto rango del Ejército israelí dijo a la edición electrónica del diario Yediot Aharonot que "la investigación acaba de comenzar" pero que "tal y como está la situación en estos momentos será embarazosa y bochornosa". "Estos son soldados que no entienden lo que representa el uniforme que visten", agregó.

El caso se suma al escándalo hace sólo unos días por una soldado que, después de licenciarse, publicó en Facebook las fotografías que se había hecho con prisioneros palestinos de Gaza esposados y con los ojos vendados.