El subcomisario Andy Hayman, jefe de las operaciones antiterroristas de Scotland Yard, dimitió hoy después de las críticas recibidas por la muerte del brasileño Jean Charles de Menezes, abatido por agentes que lo tomaron por un terrorista. Hayman, director de la unidad de operaciones especiales de Scotland Yard, que incluye la brigada antiterrorista, afirmó que abandona el cargo con efecto inmediato y que se retira del cuerpo policial.

"En las últimas semanas, se han producido filtraciones y acusaciones infundadas sobre mí que he refutado y seguiré refutando contundentemente", explicó el subcomisario. Hayman se refirió, en concreto, a informaciones periodísticas divulgadas el mes pasado que hablaban de que el dimisionario iba a ser investigado en relación con determinados gastos y viajes al extranjero acompañado por una sargenta. El responsable policial subrayó que "es el momento adecuado" para dejar el puesto tras esas "dolorosas" acusaciones, si bien su cargo ya estaba en la cuerda floja por su conducta en el "caso Menezes".

Menezes, que tenía 27 años y trabajaba como electricista, murió tiroteado por agentes de la brigada antiterrorista de Scotland Yard el 22 de julio de 2005 en la estación de metro de Stockwell (sur de Londres). Los policías confundieron a Menezes con uno de los terroristas que perpetraron los atentados fallidos de la víspera contra tres estaciones de metro y un autobús urbano de la capital (21-J). El 21-J fue un calco de los ataques cometidos el 7 de julio de 2005 contra la red de transporte londinense, que causaron 56 muertos -incluidos los cuatro terroristas suicidas- y unos 700 heridos.

El pasado agosto, una investigación acusó a Hayman de mentir a la opinión pública al no informar a tiempo a sus superiores, entre ellos el comisario jefe de Scotland Yard, Ian Blair, de que habían matado a un inocente. Según la investigación, de la Comisión Independiente de Quejas a la Policía (IPCC), supervisora de la labor de las fuerzas del orden en el Reino Unido, el comportamiento de Hayman "condujo a una información incorrecta o engañosa divulgada por la Policía".

Además, Hayman ocultó "de forma deliberada" datos a su comisario jefe Ian Blair, según las conclusiones de la IPCC. El subcomisario también quedó en entredicho en junio de 2006, cuando se vio obligado a disculparse por una redada antiterrorista en Forest Gate (este de Londres) en la que sus agentes dispararon a un hombre inocente.