La reforma a fondo del sistema de reembolso todavía está pendiente. Cuando el escándalo estalló, se introdujeron cambios provisionales y se encargó a una comisión que investigara el sistema y propusiera alternativas. Al cabo de varios meses, la comisión formuló varias propuestas. Pero estas han quedado en manos de un nuevo órgano regulador, creado por los parlamentarios, que decidirá cuáles son viables y cuáles no. El nuevo sistema podría entrar en vigor la próxima legislatura.